Como primera idea, el punto de partida que más me motiva: lograr que la capacitación se transforme en un socio del negocio, para lo cual lo primero que debemos consensuar es que la capacitación sólo tiene sentido si aporta resultados concretos y medibles al negocio. En tanto la capacitación no aporte resultados tangibles y no pueda medir y presentar los resultados como propios, no logrará ser vista como un verdadero socio.
Cómo hacemos para lograrlo? Trataré de compartir en este blog algunas ideas y experiencias que creo que pueden ser útiles en pos de este objetivo.
El primero, a modo de disparador, es un punto que asusta: En 9 de cada 10 actividades de capacitación no está claramente definido cual es el parámetro de éxito de la capacitación o que se espera de los participantes luego de la actividad o programa de capacitación.
Entonces, la primera propuesta es....empecemos por el principio! Trataremos de aproximarnos en la próxima entrega a una forma de definir los objetivos de la capacitación en términos de negocios.
Hasta la próxima!
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